La fabricación de moldes requiere alta precisión en el diseño y la fabricación, materiales duraderos para resistir el desgaste y la corrosión y un diseño estructural optimizado para lograr eficiencia y rentabilidad.
El control de calidad es vital en la fabricación de moldes y tiene un impacto directo en la calidad del producto, la rentabilidad, el cumplimiento de las normas y la satisfacción del cliente.